EL PORQUÉ DE KOKORO

Muchas veces me han preguntado el porqué del nombre de nuestro grupo de karate, el porqué de kokoro.

La primera de las traducciones sería corazón, pero eso sería quedarse alejado de su verdadero sentido.

La palabra japonesa kokoro está formado por un sólo carácter de origen chino, y hace referencia a la parte más interior o profunda de las cosas y las personas, aquella parte que no es visible a los ojos y que se contrapone a la materia, a la superficie, a las apariencias.

Se trata de un concepto abstracto muy amplio, imposible de traducir en una palabra, y que abarca, según el contexto en el que se use ideas como esencia, alma, espíritu, pensamiento, sentimiento, voluntad, hospitalidad, cariño, mente ...

Kokoro es un principio fundamental en la vía de la senda marcial que implica vivir con corazón y desde el corazón. En realidad, nada que ver con el aspecto romántico.

Algunos de sus elementos distintivos son la pasión, intensidad, capacidad para remontar en tiempos o circunstancias difíciles, voluntad férrea, no darse por vencido, crecer en la adversidad, auto motivarse, superación constante o responsabilidad personal.

Sin el kokoro toda la técnica del mundo no significa nada, y se quedará únicamente en una demostración de destreza física. Con el paso de los años de práctica el kokoro aumenta y el concepto técnico va quedando en un plano secundario, para entrar en un nivel superior de conciencia de uno mismo.

Podríamos decir que kokoro penetra en la esencia de las cosas, impregnando el espíritu de la persona y trasmitiéndose a todas las facetas de la vida.

Funakoshi decía que cualquier lugar podía ser un dojo, y ciertamente cada día tenemos mil ocasiones para desarrollar kokoro.

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